Jóvenes ambientalistas y militantes de movimientos sociales y organizaciones políticas marcharon por las calles porteñas hasta el Congreso de la Nación en la octava movilización global por el clima siguiendo el movimiento iniciado en el 2018 por Greta Thunberg, una activista ambiental sueca de 18 años y fundadora del movimiento Viernes Por el Futuro.

Bajo la consigna "Justicia social es justicia ambiental", los manifestantes, en su mayoría jóvenes, marcharon desde Plaza de Mayo hasta Plaza Congreso, donde realizaron un acto como parte de una protesta mundial por la crisis climática, que también se expresó en todo el país para reclamar medidas urgentes.

Los reclamos centrales de la movilización fueron el pedido de una transición hacia un modelo productivo sostenible; agroecología sin explotación animal; leyes de acceso a la tierra, de envases, de humedales; inversión en energía renovables; un correcto financiamiento de la Ley de Bosques y de manejo del fuego; y, sobre todo, no a la Ley de hidrocarburos.

La reclamada Ley de Hidrocarburos es un punto de inflexión para la política argentina que no para sumar rechazos. La misma propone incentivos para promover inversiones en el sector pero recibe críticas desde muchos sectores, motivo por el cuál se frenó su tratamiento en la Cámara de Senadores.

El propio Instituto Argentino de la Energía General Mosconi (IAE), consideró que el proyecto de ley de promoción de hidrocarburos, enviado al Congreso Nacional por el Poder Ejecutivo, crea inequidades y se contrapone con “criterios elementales de la transición energética”. 

Sus integrantes sostuvieron que el proyecto "compromete recursos fiscales que el Estado no posee, concede beneficios por largos períodos, tiene un diseño institucional que no es transparente, crea inequidades que serán motivo de reclamo y se contrapone con criterios elementales de la transición energética”.

Por otra parte, existen actualmente 13 proyectos de ley con estado parlamentario sobre Humedales. La discusión cobró más fuerza en el último año con los incendios en la zona del Delta del Paraná y, posteriormente, la invasión de carpinchos en Nordelta, el barrio privado construido sobre un humedal. 

El objetivo principal es establecer criterios mínimos de conservación, protección y uso razonable de los humedales, actualmente muchos requeridos para el desarrollo de proyectos inmobiliarios. 

El reclamo unió a todos los arcos políticos y a la movilización asistieron jóvenes activistas, militantes de La Cámpora, el Pro y la Izquierda, entre otros, y se enmarca en la iniciativa promovida por el movimiento internacional Fridays for Future, que tiene como referente a Thunberg.

El viernes se pudo ver a todas las fuerzas marchando por una misma consigna.

Tweet de Maximiliano

En Argentina, la movilización fue convocada por las organizaciones socioambientales juveniles apartidarias Jóvenes por el clima, Eco House, Alianza por el clima, Consciente Colectivo, Sustentabilidad sin fronteras y Fridays Argentina.

También participaron movimientos sociales como Barrios de Pie, La Poderosa, Movimiento Evita, Unión de Trabajadores de la Tierra, MTE, Cartoneros, entre otros, y movimientos estudiantiles, feministas y políticos.

La marcha se reprodujo también en Mar del Plata, Rosario, Mendoza, San Miguel de Tucumán, Córdoba, Resistencia, Corrientes, La Plata y San Fernando del Valle de Catamarca.