Es una de las personas más cercanas a Alberto Fernández y además, se transformó en una voz importante a la hora de tocar temas sensibles para la Casa Rosada. Un día después del acuerdo por la deuda, la Secretaria Legal y Técnica de Presidencia Vilma Ibarra, celebró el acuerdo con los bonistas y elogió al ministro de Economía: “Es un gran acuerdo y logro, fue un trabajo enorme del equipo de Martín Guzmán. Eso tranquiliza la economía, despeja un horizonte.  La economía viene muy débil y estamos con problemas importantes”.

Respecto de la cuarentena, las nuevas medidas y la polémica por el DNU que despertó críticas por restringir libertades, dijo: “No prevemos pena por el tema reuniones sociales, no podemos establecer ni crear delito. En AMBA todo sigue igual. Todos los que vivimos en AMBA nunca tuvimos autorizadas las reuniones sociales. En otros lugares sí se podía hacer reuniones”. Además, señaló que “resistimos a muchos que piden estado de sitio. Argentina no necesita eso. Hay que explicar y comprender. No hay condiciones ni las podemos dictar. Estamos lejísimo de esto”. Afirmó que las situaciones de incumplimiento deben ser analizadas por un juez y no por el Gobierno.

Sobre las reformas y las prioridades gubernamentales, Ibarra dijo que no fue a la presentación de la reforma judicial porque "estaba trabajando con el decreto de Vicentin” y contó que también aplican medidas de distanciamiento entre los funcionarios. En relación con la reforma, ponderó la pluralidad y aclaró que “el comité consultivo no es un tribunal, no dicta decretos ni dictámenes vinculantes; solo recomienda”. Y sobre los rumores de una posible reforma constitucional dijo que “Zaffaroni puede estar dando su opinión, pero el Gobierno no está hablando de eso".