(De la redacción de DATA CLAVE) El Gobierno Nacional analiza reemplazar parte de la ayuda a las empresas por créditos blandos para no comprometer la falta de recursos. Según pudo saber Data Clave, es una medida que se sigue discutiendo y que sería segmentada en función de la productividad.

Fue una semana de reuniones e importantes decisiones en cuanto a la mirada productiva del país. Participaron del gabinete económico el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; los ministros de Economía, Desarrollo Productivo y Trabajo, Martín Guzmán, Matías Kulfas, y Claudio Moroni, respectivamente; la titular de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont; el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, y la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca.

De esa reunión se resolvió seguir ayudando a las empresas con el plan de Asistencia al Trabajo y la Producción, que cubre el salario complementario de los trabajadores del sector privado. La medida también decidió ejecutarse en junio y fue una inversión de $125 mil millones.

Al igual que en junio, el alcance de los ATP dependerá de la ubicación de las empresas que lo soliciten. Las que se encuentren bajo régimen de Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio (DISPO) recibirán hasta un salario mínimo ($16.875), mientras que las que estén en Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO) recibirán hasta dos salarios mínimos.

Sin embargo, el gabinete de Economía entiende que es difícil plantear este escenario durante todo el año debido a la finitud de los recursos. Ante esto, y teniendo en cuenta que se avanzó de fase en el AMBA y volvieron varios sectores, estudian reemplazar en algunos sectores que ya funcionan a los ATP por créditos blandos.

Según pudo saber Data Clave, esta medida que sigue en estudio es para aquellos sectores que hayan reactivado su producción pero que todavía no lleguen a los niveles normales de facturación. Se estudia que estos créditos hasta puedan ser a tasa 0%. La idea original del Gobierno era discriminar los ATP en el mes de julio, pero los rebrotes y el endurecimiento que hubo en el AMBA del 1 al 17 obligaron a cambiar las prioridades.