El ministro de Economía, Martín Guzmán, se presentará este viernes ante los empresarios más importantes del país en una reunión “cerrada” que tendrá lugar en el exclusivo hotel Llao-Llao de Bariloche. En ese ámbito tratará de convencer a los anfitriones de que el Gobierno podrá cumplir el programa que acordó con el Fondo Monetario Internacional (FMI), más allá de algunos desvíos a los que califica de “coyunturales”.

Guzmán también insistirá que las industrias tendrán garantizado el abastecimiento de energía para este invierno, y que la senda es “ir tranquilizando” los distintos factores económicos.

Conocido como “El Grupo Llao – Llao” en honor a dónde se hace la cumbre, fue impulsado por Eduardo Elsztain, el dueño de IRSA, y a diferencia de otros foros, como el de la UIA o el Coloquio de IDEA, este es “totalmente cerrado” a la prensa o a cualquier curioso que quiera divulgar lo que se dice allí adentro, donde se accede solo por invitación.

Guzmán hablará a partir de las 19.30, luego de que se hicieran presentes, entre el miércoles y el jueves, el ex presidente Mauricio Macri; el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta; y el diputado Javier Milei.

El ministro de economía insistirá que el 6,7% de inflación registrado en marzo “es el nivel máximo” y desde el cual, comenzará a descender el ritmo de ajuste de precios.

También destacará que buscara “el diálogo entre todos los sectores” para acordar “el mecanismo”, como le gusta decir a él, para repartir “la renta inesperada” que obtuvieron algunas compañías como efecto no querido de la invasión de Rusia a Ucrania, el cual ya fue rechazado por la Unión Industrial Argentina (UIA)

Fuentes oficiales confiaron a Data Clave que Guzmán volverá a destacar la necesidad de evitar que la distribución del ingreso se haga más regresiva por efecto de “la inflación importada”, al mismo que insistirá en que el Gobierno reducirá este año el déficit fiscal al 2,5% del PBI.

Más allá de las críticas del kirchneismo, Guzmán insistirá que este “es el programa de Gobierno, y que se llevará adelante con quienes lo apoyen”.

En ese marco, volverá a plantear que en los próximos días enviará al Congreso un proyecto de ley que brinde estabilidad a las inversiones extranjeras en Vaca Muerta, y además flexibilice el cepo cambiario, lo que les permitirá a esas compañías una mayor libertad de movimiento de dólares.

En medio de esas palabras, Guzmán espera que le pregunten sobre cuál será el ritmo de devaluación que tendrá el dólar, debido a las dificultades que tiene el Banco Central para hacerse de reservas, tal como le pide el FMI, y se habrá divisas para importar, ante la “promesa” de que la producción se “caiga” ante la falta de insumos.