La investigación por la muerte de Maradona tiene por estas horas un doble foco de atención: los dos celulares de Diego y la Junta Médica. Por un lado, la Justicia está analizando todo el material extraído de los teléfonos del Diez y buscando elementos de eventual interés para la causa. Por el otro, la cantidad de partes, los procedimientos formales y los “puntos de pericia”, entre otros motivos, estiran el armado del grupo interdisciplinario de profesionales que definirá si el deceso del astro fue evitable.

Aunque dependerá de la cantidad de contenido existente en los dispositivos y esto puede anticipar los resultados, se cree que el lunes o martes estarán disponibles los peritajes al Iphone gris y al Iphone negro que tuvo Maradona hasta su muerte. La apertura de los teléfonos ya fue realizada ante las partes y las pericias se hacen sobre el sistema de extracción de datos forenses UFED, a través de una transferencia de material desde los móviles. Desde UFED analizarán si alguno de los elementos exportados puede ser de interés para la causa y en ese caso pasarán a transcribirlos como anexo al expediente.

QUÉ PODRÍAN ENCONTRAR

Las claves de acceso a los celulares fueron aportadas por la familia de Maradona. A partir de declaraciones del entorno afectivo de Diego, se cree que otras personas pudieron haber respondido sobre el estado de salud del astro en los últimos días con vida. Se supo que los tuits no eran escritos por él y ahora analizan fundamentalmente las conversaciones de whatsapp. La Justicia tiene acreditado que los encargados de su tratamiento mintieron sobre su estado de salud: es de público conocimiento que hubo firmas y certificados falsos por parte de sus médicos de cabecera.

Por lo tanto, si hubiera mensajes de interés para la causa en los teléfonos, las fechas podrían contrastarse con las pruebas con las que ya cuenta la fiscalía. Y si se comprobara que hubo personas que administraron los dispositivos para decir que Diego estaba bien cuando no lo estaba, podría haber nuevas acusaciones. Hasta ahora en la causa hay cinco imputados por homicidio culposo: Leopoldo Luque, Agustina Cosachov, el psicólogo Carlos Díaz, la enfermera Dahiana Madrid y el enfermero Ricardo Almirón.

El contenido de los teléfonos podría ser exhibido a las partes, pero sin copia de documentación como ocurrió anteriormente con los audios entre los médicos. Los investigadores no ven con buenos ojos que existan nuevas filtraciones mediáticas que desvíen el foco de atención. Como en este caso el material con el que se trabaja está exclusivamente ligado a la víctima no habrá grandes exposiciones, aunque existan claves u objetos determinantes. No descartan, sin embargo, que los teléfonos no aporten pruebas a la causa.

LOS PROBLEMAS DE LA JUNTA MÉDICA

1) La fiscalía general de San Isidro trabaja en los “puntos de pericia”. Son las cuestiones sobre las que deberán expedirse los médicos de la junta interdisciplinaria. Ya hay puntos trabajados: si la medicación era la que correspondía según el cuadro del paciente, si era contraindicada o producía efectos adversos, si la muerte era evitable y si Diego presentaba sintomatología previa, entre otros ejes sobre los que los profesionales deberán elaborar resoluciones. En cuanto a la sintomatología previa, la Justicia ya acreditó que Maradona agonizó durante unas ocho horas y que, además, el 17 o 18 de noviembre ya se lo había visto hinchado: el edema de pulmón que reveló la autopsia no habría sido tratado de forma prudente.

2) La selección de los médicos: la fiscalía busca a “los mejores en su especialidad”, dentro de distintas disciplinas. La agenda de cada profesional puede generar demoras en la convocatoria.

3) Las cinco querellas y los cinco imputados serán notificados y tendrán un período de cinco días para incorporar peritos de parte. “No es fácil tener la certeza de que los médicos contesten lo que corresponda en una causa donde hay muchos intereses”, cuentan fuentes con acceso al expediente.

4) El lugar y las fechas.

Si finalizada la Junta Médica se resuelve en línea con la hipótesis de la causa (que existió mala praxis en los cuidados previos a la muerte de Maradona y que se trató de una muerte evitable), habrá llamados a indagatoria y más personas podrían ser imputadas. El coordinador de los enfermeros es el más complicado, pero quienes convivieron con Diego hasta su muerte y suministraban la medicación quedarían bajo la lupa judicial si se acreditara que tuvieron conductas “penalmente reprochables”.