La venta ilegal de medicamentos, falsos o de los que se desconoce su procedencia, son un grave problema por la salud pública. En esa línea, una investigación de la Fiscalía PCyF N° 11 de la ciudad de Buenos Aires permitó desbaratar una organización que vendía y distrubía remedios en el ambito capitalino

La pesquisa finalizó con el secuestro de una gran cantidad de medicamentos sin facturas o remitos que permitieron conocer su trazabilidad, el decomiso de más de $500.000 y la incautación de teléfonos móviles, los cuales serán peritados e incorporados a la causa.

Según se indicó, tras meses de tareas de investigación, se logró determinar el modus operandi de una organización dedicada al comercio ilegal de medicamentos que operaba en colaboración con un importante establecimiento comercial del barrio de San Cristóbal.

Los detectivas establecieron que todos los jueves, en la esquina de las calles Humberto Primo y Entre Ríos de esta ciudad, una camioneta descargaba una serie de bultos sin identificar para ser repartidos en comercios de la zona.

La hipótesis de la fiscalía era que en esos bultos -bolsas negras y cajas de alfajores- se distribuían medicamentos en infracción. Por tal motivo, en la semana se dispuso una inspección integral al establecimiento comercial, ubicado en la calle Humberto Primo al 1800.

El procedimiento se realizó en el momento en que la camioneta ingresaba al establecimiento y permitió corroborar la hipótesis investigada. En el vehículo se encontraron medicamentos en las bolsas negras y las cajas de alfajores sin las correspondientes facturas o remitos que acreditaran su trazabilidad

Por tal motivo, se procedió al secuestro de aquellos medicamentos que carecían de documentación respaldatoria y se utilizarían para su posterior comercialización ilegal.

Asimismo, se decomisó dinero en efectivo por un valor superior al medio millón de pesos, como así también una cantidad significativa de dólares estadounidenses. A su vez, se dispuso incautar los teléfonos móviles hallados para su posterior análisis e incorporación a la investigación.

El responsable del lugar fue imputado por la fiscal por infracción a los artículos 201 y 204 del Código Penal, que penan el suministro de sustancias peligrosas para la salud ocultando su carácter nocivo y el suministro infiel de medicamentos.

El procedimiento fue llevado adelante por personal del Cuerpo de Investigaciones Judiciales (CIJ) del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad, la División Delitos contra la Salud de la Policía de la Ciudad, la Dirección Nacional de Habilitación, Fiscalización y Sanidad de Frontera del Ministerio de Salud, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT), y las Direcciones Generales de Control Ambiental (DGCONTA) y Fiscalización y Control (DGFyC) del GCBA.