Desde el inicio del aislamiento social, preventivo y obligatorio, el ingreso a algunas ciudades está prácticamente vedado. Dada esta situación y habiendo "agotado todas las instancias", los propietarios de inmuebles no residentes de Villa Gesell están organizando una caravana hacia la ciudad costera, "debido a la falta de respuesta de las autoridades".

"Hace 187 días que me prohíben entrar a mi casa. Esto es un abuso, que excede la pandemia, la cuarentena y el signo político. Es un abuso constitucional más que grave. Ni siquiera nos dan un protocolo sanitario para respetar", indicó Silvio Espósito, quien tiene domicilio en Capital Federal, pero suele residir habitualmente en Villa Gesell, a donde solía ir dos veces por mes.

En esta situación hay más de 4500 personas, entre los dos grupos de Facebook. No saben en qué estado están sus casas o departamentos, porque no han podido acceder en los últimos seis meses. No solo les preocupan los posibles delitos, sino también el estado en el que se encuentran sus inmuebles.  

"No vamos a ir a la playa a tomar sol y olvidarnos de la pandemia. Están hablando del turismo y a nosotros que somos los dueños de nuestras casas no nos dejan entrar. ¡No sabés lo angustiante que es que no te dejen entrar a tu casa, en tu país!", lamentó Espósito.

En junio, el propietario realizó un viaje hacia la ciudad costera, pero los empleados municipales le imposibilitaron el ingreso por más que llevó todos los papeles y, por recomendación de su abogado, contaba con los resultados del test PCR negativo para covid-19, que se realizó 24 horas antes. Esto no fue suficiente. El motivo: su domicilio del DNI no coincide con el de Villa Gesell.

"¡Es tristísimo! Villa Gesell tiene tres accesos. Hay dos que están tapeados con montículos de tierra que impiden el ingreso. Esto se ve en todos los pueblos. Como si el virus lo viera y por eso no entra…", señaló Espósito.

El jueves pasado el intendente de Villa Gesell, Gustavo Barrera, se reunión por videoconferencia con tres propietarios y "se comprometió a que aunque sea iban a entrar por 48 horas los casos más graves, por ejemplo los que hayan tenido robos".

"Nos dijo que a partir de esta semana íbamos a empezar a entrar. Les armamos un archivo con los datos de la gente de los grupos para que el municipio establezca las prioridades. Lo recibieron, nos agradecieron, pero hasta el 11 de octubre no hay ningún ingreso. En Pinamar ya hace un mes que están ingresando los propietarios", cuestionó el Espósito. Además, afirmó que "el intendente estuvo en Buenos Aires" en varias oportunidades.

"Nos reunimos con propietarios no residentes para llevarles tranquilidad, escucharlos e intercambiar perspectivas e inquietudes. Comenzamos a elaborar en conjunto protocolos de ingreso con condiciones seguras. La salida es colectiva", publicó el intendente Barrera en Twitter tras la reunión virtual (foto).

Espósito concluyó: "Agotamos la instancia más racional y pacífica. El intendente nos mintió, entonces vamos a pasar a otra alternativa: nos iremos en caravana y nos vamos a plantar ahí". La fecha aún no está confirmada. En el comunicado difundido ayer establecieron un plazo de 48 horas para obtener una respuesta de las autoridades locales. 

Gustavo Barrera en Twitter