Mientras el país apunta a completar el esquema de vacunación con las segundas dosis y hasta empieza a dar turnos para la tercera, se encendieron las alarmas en el mundo entero por la aparición de una nueva variante del coronavirus. La nueva cepa se detectó en África y se denominó Ómicron. Al respecto, la Organización Mundial de la Salud ya advirtió que es muy preocupante la situación.

El riesgo es que esta incipiente variante viaje por el mundo como ocurrió con las anteriores y desate un nuevo brote a nivel mundial. En efecto, ya hay casos en Europa y no son pocos los países que tomaron cartas en el asunto para intentar contener la situación.

En este sentido, los 27 miembros de la Unión Europea, han endurecido los controles y suspendido los vuelos desde siete países del sur de África: Botsuana, Suazilandia, Lesoto, Mozambique, Namibia, Sudáfrica y Zimbabue.

Cabe señalar que todos los casos de personas a las que se les ha detectado la nueva variante en Europa son viajeros procedentes del sur de África o tienen relación con ellos, por lo que no se pudo determinar aún si ya se encuentra circulando por el  viejo continente. 

La aparición de ómicron no puede ser menos oportuna ya que la mayoría de los países de Europa ya transitaba un rebrote de casos de Covid-19. Por este motivo, las distintas naciones venían endureciendo las medidas sanitarias, con vacunaciones obligatorias y con la recomendación desde la Comisión Europea de una tercera dosis.
 

La situación en los países donde ya hay casos de Ómicron

En Portugal, se detectaron 13 casos de la nueva variante, todos futbolistas o trabajadores del Belenenses, equipo de fútbol de la Primera División lusa. El futbolista sudafricano Cafú Phete regresó el 22 de noviembre al país tras jugar dos partidos con su selección. Todos los jugadores y sus contactos estrechos deben cumplir cuarentena.

En los Países Bajos también se confirmaron hasta el momento 13 casos de la nueva variante. Los afectados forman parte del grupo de 61 pasajeros con coronavirus llegados el viernes de Sudáfrica, procedentes de Johannesburgo y Ciudad del Cabo. Es posible que la cifra aumente porque las pruebas de laboratorio no han concluido.

Todos los viajeros contagiados han sido aislados, la mayoría en un hotel cercano al aeropuerto de Ámsterdam. No se descartan nuevas medidas restrictivas. Las autoridades recomiendan trabajar desde casa.

Alemania es otro de los países afectados. El domingo se confirmó un tercer caso de la variante ómicron tras conocerse el resultado del PCR de un pasajero llegado el 21 de noviembre a Fráncfort en un vuelo de Sudáfrica. El sábado las autoridades de Baviera confirmaron los dos primeros, en dos viajeros que aterrizaron en Múnich el 24.

La situación allí ya era de suma preocupación, con más de 800.000 infecciones activas de coronavirus. Por este motivo, las autoridades han endurecido las restricciones para los no vacunados, que no pueden acceder a la hotelería, al ocio, la cultura y el deporte en lugares cerrados.

Por el lado del Reino Unido, el ministro de Sanidad, Sajid Javid, aseguró el domingo en la BBC que no habrá un confinamiento total para defenderse frente a la variante ómicron, de la que ya se han detectado al menos tres casos en Inglaterra durante la pasada semana.

A partir del martes volverá a ser obligatorio en Inglaterra —ya lo era en Escocia y Gales— el uso de mascarillas en comercios y transporte público, aunque no en restaurantes o pubs. Los viajeros que entren al Reino Unido, y no procedan de un país de la lista roja (como Sudáfrica), deberán permanecer aislados hasta el segundo día, en el que deberán hacerse una PCR. Hasta que no confirmen el resultado negativo no podrán abandonar la cuarentena. 

Bélgica fue el primer país europeo donde se detectó el viernes la presencia de la nueva variante, pero las últimas medidas de las autoridades belgas no obedecen tanto a la amenaza de ómicron como a un intento de contener en el país la cuarta ola de contagios desde el inicio de la pandemia.

Se pondrá en marcha una nueva campaña de vacunación para administrar la dosis suplementaria a tres millones de personas mayores de 18 años antes de fin de año y a ocho millones en total hasta marzo de 2022 (sobre una población total de 11 millones). El país estaba en pleno brote, han pasado de una media diaria 7.800 a finales de octubre a más de 16.000 a mediados de noviembre. Por este motivo se dispuso, el cierre de hostelería a partir de las 23.00, la clausura de discotecas y un aforo limitado a 50 personas para eventos.

En Dinamarca se detectó el contagio con la nueva variante en dos viajeros procedentes de Sudáfrica. Las dos personas se encuentran aisladas y las autoridades han puesto en marcha el rastreo de contactos estrechos. Se han endurecido los controles de los países procedentes del sur de África y el Gobierno recomienda además a todos los llegados al país desde esa región que se hagan una PCR y se aíslen hasta tener un resultado negativo pasados seis días de su entrada.

Italia fue pionera en la implementación del certificado de vacunación como una suerte de carnet habilitante para casi todas las actividades públicas, incluidas las de ámbito laboral. Aun así, el Gobierno ha restringido más las medidas esta semana, obligando a tener la tercera dosis a todos aquellos que la recibieron hace nueve meses.  La región de Friuli Venecia Julia, en el norte de Italia, entró hoy en la categoría de "zona amarilla" o de riesgo medio frente al coronavirus. Este fin de semana, un pasajero que volvía de Mozambique tras hacer escala en Sudáfrica resultó positivo de la nueva mutación. También cinco familiares, que se encuentran en cuarentena y sin síntomas.

En tanto, en República Checa también se ha detectado la presencia de ómicron. La mujer regresó a su casa la semana pasada de Namibia vía Sudáfrica y Dubái. La paciente presenta síntomas leves de la enfermedad y está confinada con ocho personas más que llegaron con ella.