El ministerio de Salud de Israel evalúa agregar a la Argentina como "país rojo" ante la preocupante situación que se suscita en América Latina por la transmisión comunitaria de nuevas vacunas contra el covid-19. Los ingresos al país desde estos destinos deben ser aprobados por un Comité de Excepciones.

La cartera sanitaria israelí informó que probablemente Argentina será incorporado a su lista de “países rojos”, debido a los altos índices de contagios de COVID-19 y la transmisión comunitaria de nuevas variantes del virus, consideradas de mayor contagiosidad y letlidad.

La lista fue confeccionada el pasado 3 de mayo y entre los países también están Brasil y México. En el caso de Argentina, la medida empezaría a aplicar el próximo lunes 17 del mismo mes. Esta categoría incluye también a Ucrania, Etiopía, India, Sudáfrica y Turquía.

Los ingresos a Israel desde estos países están subordinados a la aprobación de un Comité de Excepciones y exigen de las personas arribadas un período de aislamiento preventivo de 14 días desde el momento del aterrizaje en el aeropuerto internacional Ben Gurión. El plazo del encierro se puede achicar a 10 días si se acreditan dos pruebas negativas de coronavirus.

“El virus no nos espera, debemos seguirle el ritmo. La variante india comienza a ser un problema que tal vez no sea grande, pero en este momento no está claro, por eso las decisiones deben aplicarse de inmediato”, afirmó la profesora Galia Rahav, integrante del comité de asesores del Ministerio de Salud.

Científicos israelíes en Argentina

Una delegación del hospital Hadassah Ein Kerem arribó al país con el objetivo de avanzar con autoridades argentinas en el desarrollo de la fase 3 de la vacuna israelí, denominada Brilife.

“Estamos trabajando en una cooperación a distintos niveles. Uno de ellos es la fase 3 de la Brilife, algo que se lleva adelante en conjunto entre Hadassah y el Instituto Israelí de Investigación Biológica. Todavía no estamos a nivel de acuerdos (con la Argentina). Estamos explorando las posibilidades y hay reuniones estratégicas esta semana para poder confirmar esta posibilidad”, le dijo Jorge Diener, director general, al portal Infobae.

La delegación llegó este sábado y se quedaría hasta el 14 de mayo está encabezada por el profesor Yoram Weiss, director del Hadassah (el hospital que más pacientes Covid–19 atendió durante la pandemia) e integrada por el ya citado Jorge Diener; la profesora Sigal Sviri, directora de la Unidad de Cuidados Intensivos de Hadassah para Covid-19, y la enfermera Claudia Poggi, quien trabajó en la terapia intensiva de Coronavirus en el nosocomio israelí.

La intención es trabajar de forma conjunta para analizar cómo se está trabajando en la fase 3 para el desarrollo de la vacuna. Vale resaltar que Israel es uno de los países que pudo prescindir del tapabocas, ya que realizó uno de los planes de vacunación más exitosos a nivel mundial.

Los dos ejes de la colaboración con la vacuna Brilife pasan por la realización de la fase 3 de prueba de la vacuna y su producción a nivel industrial. Ambos están interrelacionados ya que, según explicó Diener, la generación de las dosis necesarias para una tercera fase de testeo tendría que hacerse en la Argentina ya que en Israel “no hay por ahora una producción masiva como para una fase 3”.