El Evita tomó la decisión electoral de priorizar la disputa interna en algunos distritos bonaerenses por encima de una participación legislativa. Como parte de una negociación macro, el movimiento conducido por Emilio Pérsico resignó puestos en las listas con la condición de poder plantar una boleta en municipios que el dirigente considera claves.

Sin embargo, las cosas no salieron según lo planeado. De los cinco municipios donde el Evita presentó una lista interna los resultados no lo favorecieron en ninguno y perdió en todos los casos.

El más resonante fue en La Matanza, donde Patricia Cubría se subió a la contienda local más dura pero cayó derrotada ante el jefe comunal Fernando Espinoza. Le diputada bonaerense se llevó el 38 por ciento de los votos de Unión por la Patria, una cifra nada despreciable. Sin embargo, el alcalde sumó un 59 por ciento. El resto de los votos fueron para María Laura Ramírez.

En Lanús, el Evita volvió a jugar una apuesta parecida a la del 2019. Agustín Balladares se hizo cargo de la precandidatura, pero quedó en segundo lugar entre los cuatro contendientes. Superó a Nicolás Russo y Víctor De Gennaro, pero no pudo contra el camporista Julián Álvarez.

Las cosas no fueron diferentes en Tres de Febrero, al igual que en Lanús, otro de los distritos donde gobierna el PRO. En el distrito de la primera sección electoral, Lis Díaz se llevó el 40 por ciento de los votos de la interna contra el 60 de Juan De Bandi y, de esa manera, el Evita sumó otra derrota.

El caso de San Martín quizá fue uno de los mayor impacto. Sucede que en el distrito donde gobierna Fernando Moreira, el movimiento tenía cierta esperanza por la precandidatura del diputado nacional Leo Grosso. La salida de Gabriel Katopodis del distrito abría la posibilidad de barajar y dar de nuevo. Pero el jefe comunal golpeó fuerte y se llevó el 67 de los votos contra el 33 del legislador.

La otra derrota, quizá la menos conocida, se dio fuera del Conurbano. En Lobos, Milagros Moya fue la dirigente que quedó más cerca de poder imponerse en la interna al cosechar el 42 por ciento. Sin embargo, todo hubiese sido cuesta arriba camino a octubre ya que UP cayó contra Juntos por 47 a 33.

La única celebración se dio en Moreno, donde el Evita tiene su única intendencia a favor desde 2019 cuando Mariel Fernández le ganó la interna a Walter Festa y se quedó con el distrito. Pese a que le presentaron dos listas internas, la jefa comunal arrasó con el 68 por ciento de los votos y, de seguro, en octubre vuelva a ser elegida.