La investigación impulsada por la fiscal cordobesa Juliana Compañys contra el holding Generación Zoe sigue acumulando detenidos y pedidos de captura. Lo que comenzó el pasado 18 de febrero como una denuncia por “estafa” dejó al descubierto un enorme entramado, mediante el cual presuntamente se captaban inversores con promesas de elevados intereses mensuales.

Las caras visibles del holding son Leonardo Cositorto y su socio Maximiliano Batista. Sobre ambos pesan pedidos de captura. Sin embargo, en las últimas horas surgió otro nombre: Gustavo Saavedra.

El abogado sería apoderado de las propiedades de Cositorto y del exjuez Héctor Luis Yrimia –supuesto asesor jurídico de ZOE-, y se trataría de inmuebles que se obtuvieron a través de la firma, según informaron fuentes a Data Clave.

“Equipo jurídico contable de ZOE. Gustavo, Norman, Luis y Eduardo”, publicó Cositorto en sus redes sociales antes que estallara la polémica.

Gustavo Saavedra, una de las piezas claves detrás del escándalo de Generación Zoe

Junto a esta frase, Cositorto publicó una foto en las oficinas del holding. Allí aparece Saavedra junto a Cositorto, Yrimia y el contador Norman Próspero, quien se encuentra detenido en la causa de Villa María.

Saavedra trascendió en los medios, luego de solicitar que se reabriese el caso por una declaración de quiebra de Cositorto en 1999, que había sido archivado en 2006 al no encontrársele activos que poder embargar.

Desde la clandestinidad, Cositorto habló de "infiltrados". "Hay personas que son agentes", agregó apuntando presuntamente contra Saavedra.

También defendió a Yrimia y relacionó su pedido de captura con la denuncia impulsada por el fallecido fiscal Alberto Nisman contra la entonces presidenta Cristina Kirchner por encubrimiento del atentado a la mutual judía, ocurrido en 1994. "Me vienen informando que hay un pase de factura o una devolución de favores. El juez hizo un dictado y le están devolviendo el guante", sostuvo en un Zoom.