El radicalismo enfrenta, en la provincia de Buenos Aires, una de las batallas más duras hacia adentro del partido. Las diferencias entre el presidente del comité provincial, Maxi Abad, y el referente de la línea opositora, Gustavo Posse, miden cada uno de sus pasos en el marco de una pelea nacional que también involucra al PRO.

Es que, en los hechos, la UCR hoy está discutiendo para ver quién se queda con la vicegobernación en una fórmula híbrida con el partido amarillo. Y, como parte de ese combo, las posturas de ambos dirigentes se contraponen. Abad llamando a la unidad de todo Juntos en busca de decidir a dedo las candidaturas del partido y Posse presionando para ir a una primaria y ganando el derecho de ser la mejor carta de los boinas blancas en las urnas.

Como parte de una novela sin fin, el possismo presentó en las últimas horas un recurso de amparo ante la Justicia Electoral para suspender la convención provincial fijada para este sábado a las 1230 en Coronel Suárez. Sostienen que la convocatoria se hizo fuera de los plazos previstos en la carta orgánica. 

“Llamaron una semana antes cuando la convocatoria se tiene que hacer con 30 días de anticipación. Van a decir que hay un artículo que dice que se puede convocar por necesidad y urgencia. Pero no hay nada de eso. No convocaron como corresponde porque hoy no tienen los números que necesita”, le dijeron a Data Clave desde el possismo.

Vale mencionar que la convención, entre otras órdenes del día, busca ratificar la política de alianzas y facultar a la Mesa Ejecutiva del Comité Provincia para instrumentar los acuerdos pertinentes. En otras palabras, darle a Abad la posibilidad de acomodar en su favor con el respaldo de una buena cantidad de intendentes radicales del interior que ven en Patricia Bullrich a la mejor candidata nacional para dar la pelea nacional.

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Pero Posse quiere ir a una PASO. Se sabe que el jefe comunal de San Isidro se mueve en la línea del presidente del comité nacional del radicalismo, Gerardo Morales, muy cercano a Horacio Rodríguez Larreta. “Posse se la pasa poniendo trabas para todo. Y el único perjudicado siempre es el partido. Es la misma persona que dice estar en contra de las reelecciones indefinidas y lleva 24 años en San Isidro”, le dijo a este medio un jefe comunal alineado a Abad.

Ahora quien deberá resolver luego de escuchar este jueves a ambas partes es el juez Alejo Ramos Padilla. Durante este viernes se sabrá cómo seguirá esta compulsa que, más allá de lo dictamine el magistrado, crece día a día en intensidad. 

Desde el lado de Posse buscan que la convención se haga la semana que viene en La Plata. “Lo hacen en Coronel Suárez, a 550 km de La Plata para que no vaya nadie y para que no se haga nada. Bien a lo Maxi Abad”, agregaron desde el sector del alcalde del Conurbano.