Ya se cumplió una semana de la acalorada primaria en Santa Fe donde Maximiliano Pullaro se convirtió en el candidato a gobernador del “frente de frentes” que integra Juntos por el Cambio. La disputa interna con la senadora Carolina Losada fue la más efusiva en una coalición que tuvo innumerables cruces durante el año. 

Luego de esto, el clima no aflojó. En la semana hubo un comunicado de los “Bullrichistas” acusando al “Larretismo” de llevar la interna a niveles de tensión desproporcionados. El detonante fue el diputado Juan Manuel López, una de las voces potentes de la Coalición Cívica y que tanto aprecia personalmente Elisa Carrió cuando comparó un posible gobierno de Patricia Bullrich con el de Fernando De la Rúa y su crítico final de 2001.

En este contexto, tal como contó Data Clave, los principales armadores políticos de ambos lados del mostrador empiezan a tener conversaciones informales pensando en lo que será en la noche del 13 de agosto. A fin de cuentas, sólo uno de los dos precandidatos competirá contra Unión por la Patria en las elecciones de octubre.

Según pudo averiguar este portal, todo deberá definirse en los próximos días. Esta semana habrá encuentros formales para definir si habrá búnker compartido o Juntos por el Cambio tendrá dos escenarios distintos. Algunos memoriosos recordaron que en 2021, por ejemplo, Facundo Manes y Diego Santilli estuvieron en lugares distintos durante toda la jornada y el perdedor se acercó a la noche a la trinchera del ganador.

Este domingo hubo una señal en el mismo sentido con la presencia de todos los sectores en la elección capitalina de Córdoba en apoyo al único candidato de JxC, Rodrigo De Loredo. El radical fue en formula con Soher El Sukaria, del PRO. Sin grieta interna, las principales voces de Juntos se alzaron contra el peronismo local en la previa cuando una polémica solicitada y se mostraron en el escenario con la formula de la coalición pese a la inesperada derrota.

En el escenario nacional, los niveles de tensión son los que ponen en duda que pueda existir un búnker compartido durante el día de la elección. Hay temor por los cánticos. En ambos bandos es un factor decisivo que se ponga en compromiso la convivencia. Desde el sector del jefe de Gobierno porteño hay voluntad de compartir lugar, mientras que desde el entorno de Bullrich prefieren esperar y tomar una decisión la próxima semana, cuando existan las charlas.

A pesar del clima tenso, habrá una reunión para coordinar la logística y garantizar que haya un buen ganador y un buen perdedor.