La Defensora del Público, Miriam Lewin, expuso en forma virtual ante la Comisión Bicameral de Promoción y Seguimiento de la Comunicación Audiovisual, las Tecnologías de las Telecomunicaciones y la Digitalización que preside la diputada oficialista Gabriela Cerruti (CABA), para dar “cuenta de las principales acciones de sus primeros 100 días de gestión al frente del organismo”.

La oposición que impulso el pedido para que asista la funcionaría, comenzó la ronda de preguntas, la radical Karina Banfi (Buenos Aires) remarcó que “el Estado debe promover que la sociedad civil se autorregule, lo que tenemos que generar son sistemas o mecanismos de autorregulación en la ética periodística, en el periodismo de calidad”, dijo la bonaerense y preguntó por una posible autocensura.

Desde el oficialismo, Pablo Carro (Córdoba) defendió la propuesta de la Lewin y señaló que “lo que hace la defensoría del público es defender a las audiencias y si hay algo que estas vienen reclamando es el problema de la desinformación. Los observatorios no solo son necesarios, son imprescindibles”, sentenció.

A su turno, la defensora aclaró que NODIO “no se trata de una iniciativa ni un nuevo observatorio” como se difundió en los medios y afirmó que “es el desarrollo de un plan de acción”.

En este sentido, Lewin apuntó que no están “de acuerdo con las políticas punitivas, es decir, normas legales que sancionen la publicación en los distintos medios. “Creo que esto se resuelve con cambio cultural, a eso intentamos apuntar y promover. No estamos a favor de censurar, prohibir o multar”, dijo. 

El cuestionado proyecto de la defensoría busca “ampliar el análisis de contenidos socio semióticos”. Se trata de la elaboración de “insumos académicos” que el organismo quiere aportar a la sociedad. Sobre la autocensura dijo que era “un problema por los gobiernos y por las precarizaciones de los trabajadores de prensa”.

Un grupo de diputados de Juntos por el Cambio había denunciado a la titular de la Defensoría del Público por este “observatorio contra la desininformación y la violencia simbólica”. La acusaron de abuso de autoridad y violencia de los deberes de funcionario público. La denuncia que recayó en el juzgado a cargo de María Eugenia Capuchetti, con la intervención del fiscal Carlos Stornelli, se desestimó rápidamente.

El diputado Waldo Wolff (Buenos Aires) explicó el motivo de su presentación judicial. “Fui a la Justicia que es donde se dirimen las diferencias y me atengo a lo que dijo la jueza Capuchetti.  Lo que hice con Lewin lo hice conmigo también, me auto-denuncié cuando se me acusó de filtrar datos personales de Massa. No tengo nada personal. La Justicia dijo que no había delito, me alegro por eso”, aseguró el diputado.

Para cerrar, el senador oficialista Alfredo Luenzo (Chubut) llamó a dar el ejemplo para combatir el odio de las redes sociales y pidió acompañar una declaración en la comisión para luchar contra los nuevos “malos hábitos” de las tecnologías. Los bloques se comprometieron a conciliar una redacción en común.