El tiempo logra curar hasta las peores heridas. Será la historia también de lo que dejó la última sesión en la Cámara de Diputados con el rechazo del Presupuesto 2022. La tensión, la rispidez, la subida de tono y hasta los insultos serán algún día parte del pasado. El Frente de Todos empieza a dar vuelta la hoja pensando en la delicada situación económica que tiene que enfrentar el país y las negociaciones por la deuda.

El primer paso que se traza el oficialismo en Diputados es presentar este martes en la comisión de Presupuesto y Hacienda un nuevo proyecto para modificar el impuesto a los Bienes Personales. La oposición logró imponer en la sesión del jueves una prioridad para tratar en comisión este martes la media sanción del Senado que eleva el mínimo no imponible, pero el Frente de Todos irá con un nuevo proyecto.

La nueva redacción que propone la bancada oficialista tiene tres aspectos centrales: eleva el mínimo no imponible a $6 millones (actualmente en $2 millones), sube la alícuota más alta al 1,5% (actualmente en 1,25%) y establece una actualización anual por IPC.

La bancada que conduce Máximo Kirchner tendrá un encuentro con el presidente de la nación este lunes por la noche en Olivos. Será el habitual brindis de fin de año que hace el primer mandatario con los diputados nacionales. Luego de esta salutación “frentedetodista” el gobierno dispondrá del llamado a sesiones extraordinarias. En la Cámara baja desconocen los temas que pondrá el Ejecutivo.

Sin dar plazos, en la conducción del oficialismo estiman que el rechazo del presupuesto “retrasó el acuerdo con el FMI” y por ende, el plan plurianual es una incertidumbre. “Cómo vamos diseñar un plan de varios años si no nos aprobaron el que dura un año”, en referencia al presupuesto. En todo esto, lo que esperan que pueda hacer el Fondo en el tiempo pautado es la presentación técnica sobre el préstamo otorgado a la gestión de Mauricio Macri. “Va a ser lapidario”, adelantaron.

En el Frente de Todos aún persiste la bronca por lo que pasó la semana pasada. Entienden que la oposición entró en un círculo explosivo interno que terminó por dinamitar todos los puentes de acuerdos. “Seguiremos presentando leyes y si quieren rechazar todo que lo hagan, después la población evaluará”, se quejan. Con la nueva conformación, los 10 bloques internos y la falta de conducción, se gestó una fuerte interna a cielo abierto en Juntos por el Cambio que sorprendió a la propia bancada oficialista que recibió reclamos por separados. “Desde el primer día les estamos pidiendo que resuelvan la presidencia del interbloque”, se quejan.

La relación del nuevo armado de Juntos por el Cambio con el oficialismo no empezó de la mejor manera. “Gritan 10 y se los llevan puesto a todos”, describen los que estuvieron siguiendo las negociaciones por el Presupuesto. Los más abiertos al diálogo, Emilio Monzo, Diego Santilli y hasta el propio Mario Negri terminan chocando con el resto. "Al final vos seguís siendo cómplices de ellos", le gritó desde su banca y a la vista de todos un nuevo integrante de JxC al ex titular de Diputados durante el gobierno de Cambiemos.