“Si esto no se soluciona vamos a salir a la ruta, vamos a movilizarnos a la ruta, 15, 20, 35 mil trabajadores, que estamos seriamente afectados”. Lo dijo Guillermo Pereyra,  secretario general del sindicato del Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa, en el medio de un conflicto que surgió hace 17 días y que pone en jaque el abastecimiento de combustible y gas en Argentina.

El conflicto surgió por el corte de rutas que protagoniza los trabajadores autoconvocados del sistema de salud de Neuquén, en reclamo de mejores condiciones laborales. Mantienen cerca de 20 cortes en simultáneo en las diferentes rutas de la provincia.

El sábado pasado, el gobierno provincial le propuso a los autoconvocados un bono no remunerativo de 40 mil pesos, a pagar en cuatro cuotas, la cual fue rechazada. “Cuando tengan una propuesta de aumento al básico que nos llamen y nos sentamos a discutirla. Mientras tanto vamos a seguir sosteniendo los cortes de ruta y profundizar las medidas”, dijo Marco Campos, referente de los trabajadores sanitarios.

Por su parte, el ministro de Energía de Neuquén, Alejandro Monteiro, dijo que el incremento salarial pretendido es “imposible de cumplir” para la provincia, en una entrevista publicada en La Nación. El funcionario sostuvo: “Vemos mucho apoyo de grupos de izquierda y de organizaciones sociales. Yo creo que hay sectores que forman parte del Frente de Todos que están brindando el apoyo”.

Pereyra advirtió que “otros gremios” que también están seriamente afectados, como el personal jerárquico, o los compañeros de camioneros, “seguro van a participar” porque están todos en la misma situación. “Vamos a salir a la ruta y le vamos a pedir a los ‘trabajadores’, que no son trabajadores, trabajadores son los que se están rompiendo el culo en los hospitales, no estos anárquicos que están tratando de desastibilizar, le vamos a dar la lección”, lanzó el dirigente gremial.

La actividad en Vaca Muerta continúa paralizada con más de 70 equipos de perforación, fractura y terminación inutilizados. Se estiman pérdidas de US$ 13 millones por día para las empresas petroleras. A raíz de esto corre riesgo la provisión de combustibles en el país. La industria proyecta que el costo de importar más más combustibles líquidos o GNL representaría para el Estado de entre USD 190 millones y USD 200 millones extra.

Este conflicto podría provocar el cierre de un 10% de la producción de gas del país. El portal Econojounal informó que “la provincia de Neuquén aportó en febrero 61 millones de los 114 millones de metros cúbicos diarios de gas natural que produjo la Argentina, el 53,5 por ciento”.

La cámara que nuclea a las petroleras le envió una nota a las autoridades nacionales y de Neuquén para que intervengan en el conflicto.