El Ejecutivo nacional deberá decidir este lunes si acepta el reclamo del conjunto de provincias integrantes del Comité Interjurisdiccional del Río Colorado (Coirco) que pide un nuevo estudio ambiental para relevar el impacto del emprendimiento o si avala el planteo de Mendoza, que quiere avanzar con el dique bajo la certeza de que ese estudio ya se hizo y respaldó su factibilidad.

Es que este lunes vence el plazo para que el Presidente defina oficialmente que pasará con la obra. El Gobierno provincial de Mendoza no adelantó qué hará ante un arbitraje que se presume negativo para sus intereses. 

La última alusión al tema desde el Gobierno nacional fue a favor de la realización de un nuevo estudio de impacto ambiental para el megaproyecto hídrico Portezuelo del Viento, ubicado sobre el Río Grande, en el departamento de Malargüe. Fue el propio presidente Fernández, quien lo anunció en su visita a la ciudad pampeana de General Pico.

“Las cuatro provincias por donde pasa el río Colorado, Neuquén, La Pampa, Río Negro y Buenos Aires, me han pedido que hagamos un estudio del impacto ambiental sobre los efectos que podría generar la construcción de la obra hídrica. Y yo haré lugar a que se haga ese estudio porque, así como los gobiernos no son propiedad de los que gobiernan, los ríos son propiedad de los argentinos y las argentinas que los necesitan”, dijo el Jefe de Estado.

Según informó el diario mendocino Los Andes, en el Gobierno provincial mendocino esperan este lunes como “el ‘día D’ para el proyecto Portezuelo del Viento” con cautela y en silencio. Con poca esperanza y con la tendencia hacia una definición contraria a sus intereses, en las filas de Rodolfo Suarez solo filtran que de no haber sentencia de Fernández mañana, se avanzaría con un reclamo administrativo.