Ya no es solo el bloque de Juntos por el Cambio el que pide precisiones sobre los ajustes fiscales y monetarios del posible acuerdo que busca cerrar el Gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI), sino también el kirchnerismo, disgustado por la forma en que se llevó adelante la negociación.

Quedó atrás la renuncia de Máximo Kirchner a la jefatura de la bancada de Diputados del Frente de Todos, y fue su segunda, Cecilia Moreau, la que explicitó las demandas del sector.

En medio de versiones sobre si las tarifas aumentarán 20 o 30% este año, y si el “acuerdo” permite o no, emitir pesos para comprar dólares, la diputada declaró este viernes que el ministro de Economía, Martín Guzmán "tendría que haber venido al bloque a dar explicaciones" sobre el acuerdo.

"Creo que Guzmán no tuvo el tiempo o la dedicación que tendría que haber tenido para conversar con el bloque. Me hubiese gustado que eso ocurra para que todos podamos despejar las dudas que tenemos como militantes, como argentinos y como diputados", dijo Moreau en declaraciones a la radio Futurock.

Guzmán ya dijo todo lo que podía decir, cuánto tiene que bajar el déficit fiscal, y la asistencia monetaria del Banco Central al Tesoro, pero ahora es tiempo de negociación de “los detalles”, como si esa limitación en la emisión alcanza, o no, para la compra de dólares por parte del Estado, y qué nivel de reajuste deben tener las tarifas, para reducir los subsidios y el rojo de las cuentas públicas.

En este marco, el ex director del FMI, Claudio Loser, aseguró que en el entendimiento alcanzado entre el Gobierno y ese organismo “hay un problema de semántica, porque dicen que no hay ajuste y lo llaman ordenamiento”.

“Primero, no puede haber renovación del crecimiento más allá de lo que pasó en el 2021, que fue salir del pozo, sin disciplina fiscal y monetaria. No hay país que haya crecido en forma sostenida, teniendo una inflación del nivel (de Argentina) y con el desordenamiento que hay, que haya podido crecer. Tiene que haber ajuste, pueden llamarlo como quieran, pero va a ocurrir", dijo Loser.

El exdirectivo del FMI apuntó a que el acuerdo contempla “un gradualismo” en el que Argentina “va cerrando la brecha financiera y esto va a permitir bajar la emisión monetaria”.

Desde JxC, el exministro de Hacienda y Finanzas, Hernán Lacunza, condicionó el poyo que la oposición vaya a brindar al acuerdo con el Fondo.“Si hay un plan lógico, la oposición va a acompañar, y si no es lógico, no”, dijo el último ministro de Economía de Mauricio Macri, y apuntó a que “por primera vez hay un mapa de a dónde queremos ir en materia fiscal y monetaria, que hasta ahora no estaba. Lo que no hay todavía es el plan de vuelo para recorrer ese mapa”. Y en ese marco, subrayó: “No sé cómo van a hacer para bajar el agujero fiscal con aumento de gasto público”,

Guzmán sabe que tiene tiempo para renegociar la deuda hasta el 21 de marzo. Para esa fecha vencen US$ 2.800 millones del FMI y otros US$ 1.900 del Club de Paris, pagos que no puede afrontar con las menguadas reservas del Banco Central.

A partir de ese día, Argentina tendrá tres meses para pagar por estar “en mora”, ya que para el 21 de junio el FMI publicará que existe un “atraso”, y se le indicará al país que no tendrá acceso a ninguna asistencia, ni siquiera de aquellas para combatir la pobreza, hasta que normalice los pagos.