La tendencia alcista del precio del dólar, que comenzó a insinuarse a mediados de la semana pasada, tomó mayor dinamismo este miércoles, cuando se negociaron US$ 350 millones en el Mercado Libre de Cambios, y en el que el Banco Central termino vendiendo US$ 80 millones, que se sumaron a los US$ 19 millones de ayer.

El desarme de posiciones en pesos de varios agentes financieros para pasarse al dólar imprimió una fuerte demanda desde el comienzo de la jornada, ante una muy escasa oferta de parte de las exportadoras.

“Ya se liquidó todo el “dólar soja” que había. Ahora solo quedan algunos que venden para comprar insumos o necesidades puntuales de cobertura”, explicó Julián Cuenca, de la consultora Economía y Sociedad.

Esta situación “no es nueva. Hasta septiembre se estira la liquidación de la cosecha gruesa, luego, hasta diciembre que entran las exportaciones de trigo, la oferta (de granos al exterior) es escasa”, dijo Cuenda a Data Clave.

En este marco el Dólar Contado Con Liquidación subió 4% para llegar a los $ 902,50, en tanto el MEP avanzó 3,4% y cerró en torno de los $ 745.50.

En tanto, en el mercado libre de cambios, la tendencia alcista mostró algunos “altibajos” pero al final, acompañó al CCL y subió 4% para cerrar en $ 843.

En medio de este panorama, la tasa de Riesgo País volvió a subir otro 2%, por la caída de los títulos de deuda argentina, y se ubicó en los 2.697 puntos.

Todos estos movimientos se dieron a la par de que el Banco Mundial brindara un informe más negativo sobre las perspectivas de la economía argentina para este año. Según la entidad crediticia el país registrará una recesión del 2,5% este año (antes la estimaba en 2%), y un rebote del 2,8%´para el 2024, contra el 2,3% que habían estimado en marzo.

Así lo informó el economista jefe del banco multilateral para América latina, William Maloney, en una conferencia de prensa desarrollada desde Washington.

Cuando se le preguntó su opinión sobre la dolarización que propone el candidato a presidente de la Libertad Avanza (LLA) Javier Milei, indicó que esta “puede ser útil para moderar las expectativas de inflación porque se limita la capacidad del banco central para imprimir el dinero. Pero si no hay una reforma fiscal se van a producir otras distorsiones y problemas”.