Por cuarta jornada consecutiva el Banco Central cerró con saldo vendedor y acumuló en junio, luego de que terminara el “Dólar Agro”, un saldo negativo para la entidad monetaria de US$ 337 millones.

En una rueda mayorista con un monto operado de US$ 318,5 millones, las liquidaciones por el dólar agro a $300 por unidad, y que esta semana quedaron limitadas a las producciones regionales, se redujeron a US$ 13,8 millones. Por todo esto, el Banco Central vendió US$ 48 millones con lo que finalizó la semana con un saldo vendedor de US$ 228 millones.

Según estimaciones privadas a partir de las cifras del BCRA, las Reservas terminaron en US$ 32.676 millones con una caída de US$ 11.912 millones en lo que va del año.

En el Ministerio de Economía estiman que la pérdida de ingresos del sector agrícola por la sequía rondará los US$ 18.000 millones, que podrían reducirse a US$ 17.200 millones cuando en noviembre y diciembre comiencen las exportaciones de trigo, el cual se vio favorecido por las últimas lluvias.

Mientras tanto, desde el ministerio de Economía siguen las negociaciones virtuales con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en busca de que les adelantes US$ 10.000 millones de desembolsos previstos hasta fin de año, de los cuales US$ 2.900 millones deben pagarse antes de fin de mes.

Según fuentes allegadas a la negociación, el organismo solo aceptaría adelantar US$ 7.000 millones, es decir, lo que le corresponde al gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner, y dejar el resto para luego del 10 de diciembre, cuando asuman las nuevas autoridades.

Además, los casi US$ 4.000 millones que quedarían “líquidos” luego del pago de junio, no serían de “libre disponibilidad”, sino que cada vez que quiera utilizarlo el gobierno para aplacar el mercado de cambios, debería contar con la aprobación del organismo.