La situación en Medio Oriente es de extrema gravedad. En los últimos días subieron los niveles de hostilidades en la Franja de Gaza con ataques cruzados. El conflicto palestino-israelí de larga data vive uno de sus peores estallidos de los últimos años. 

El último ataque se registró en la ciudad de Ashkelon, que dejó dos muertos. En tanto, en el contraataque israelí de anoche murieron  más de 20 palestinos, entre ellos dos hombres fuertes del grupo terrorista Hamas.

Máxima tensión en Medio Oriente: cae un misil cada 3 minutos sobre Israel y en un contraataque mueren dos líderes de Hamas

Producto de la lluvia de misiles, una escuela fue impactada por un cohete disparado desde Gaza. Por fortuna no había niños en el establecimiento educativo. 

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Hasta el momento hubo 26 muertos en el primer sitio, 17 de ellos militantes de Hamas y de la Jihad Islámica, y dos mujeres fallecidas en Israel, con cientos de heridos en ambos lados. Cayeron más de 300 misiles en Israel, el 90% de ellos fue interceptado por la Cúpula de Hierro y se prevé que la violencia continúe por varios días. 

Al respecto, el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel, Jonathan Cornricus, dijo a CNN que el fuego provenía de dos grupos militantes palestinos, Hamas y la
Jihad Islámica, y dijo que las FDI intensificarían su respuesta.

“Hamas y la Jihad Islámica han ampliado el alcance de la intensidad y el ritmo de su fuego”, dijo Cornricus, y agregó que se ordenó al ejército israelí “continuar y mejorar las operaciones de las FDI contra los terroristas en el terreno, así como su infraestructura y sitios clave a través de la Franja de Gaza”

En efecto, en los últimos minutos, desde la cuenta oficial de Twitter de FDI informaron: “En las últimas 24 horas, Hamás y la Jihad Islámica han llevado a cabo ataques continuos contra Israel desde Gaza.Las FDI estamos operando en respuesta a estos ataques, alcanzando a operativos y objetivos terroristas en Gaza. Esta es la operación Guardián del Muro”.

Tweet de FDI

Previo al ataque, Hamás había advertido en un comunicado pocas horas antes de que si las fuerzas de seguridad israelíes no se retiraban de la mezquita de Al Aqsa actuarían “en represalia por los crímenes en la Ciudad Santa y la brutalidad contra el pueblo palestino”.

Se trató de una aparente respuesta del grupo militante a los más de 300 palestinos que han resultado heridos en los enfrentamientos con las fuerzas israelíes frente a la mezquita de Al-Aqsa, donde protestan contra un nuevo intento de desalojo de familias palestinas en Jerusalén Este.