El histórico pasaje a la final de la Selección Argentina en la Copa del Mundo produjo una inyección de serotonina para un país que llegaba a la última recta del año con pocas cosas para festejar por la crisis económica y los salarios deprimidos. Sin embargo, a pesar de la goleada ante Croacia, las bases ya empiezan a golpear la puerta del Gobierno y advierten por los aumentos en las góndolas con la cercanía de las fiestas de fin de año.

Los movimientos sociales, los principales afectados en los aumentos de precios, insisten con marcarle la cancha a un sector político que hoy tiene en agenda lo que queda del Mundial y algunas disputas propias, como es el Consejo de la Magistratura y la pelea propia que tiene el Gobierno con la Corte Suprema de Justicia.

Y a pesar de que el triunfo por la ‘Scaloneta’ es total, lo cierto es que también llegan las quejas desde los movimientos sociales. Uno de los que inició las críticas fue Rafael Klejzer, exfuncionario del ministerio de Desarrollo Social y uno de los referentes de la Unión de los Trabajadores de la Economía Popular (UTEP).

“En esta Navidad, la mesa de las y los argentinos va a tener menos para festejar”, fue lo primero de lo que se quejó, mientras que agregó que “en comparación con diciembre de 2021, la canasta navideña aumentó un 127,03 %”.

“Esta comparación arroja que el aumento supera por un amplio margen la inflación acumulada en estos meses y que las distintas medidas que se tomaron para controlar precios no fueron suficientes, al menos para estos productos”, sostuvo. Y luego, cuestionó: “Ni el Gobierno ni las empresas tienen en cuenta el derecho de los sectores populares a pasar las fiestas con dignidad”.

El Gobierno intentará dar una respuesta en ese sentido. Esta tarde habrá un anuncio de un bono de fin de año por $20.000 para trabajadores del sector privado y beneficiarios del plan Potenciar Trabajo. En cuanto a los privados, sería un bono para aquellos empleados que perciban un salario de hasta $180.000. 

El secretario de Industria, José Ignacio de Mendiguren, manifestó al respecto en AM 750: “El gobierno nacional planifica una ayuda extraordinaria y toda la energía está puesta en recuperar el poder adquisitivo del salario además de evitarse una devaluación brusca”.

Rafael Klejzer, sobre el contexto de crisis, dijo: “Cuando el 24 de diciembre sean las 12 de la noche, las familias argentinas van a tener que elegir si brindan o comen un pan dulce. No podemos naturalizar que, mientras algunos sectores privilegiados reciben condiciones que les permiten incrementar sus ganancias, las y los trabajadores tengamos que hacer cuentas para poder festejar”. 

Por último, el referente de UTEP, cerró: “Este seguimiento realizado nos permite afirmar que, en diciembre del año pasado, un trabajador o trabajadora que percibía el salario mínimo vital y móvil, podía comprar hasta diecisiete canastas navideñas. Mientras que ahora solo podrá adquirir trece”.