Hace unos meses Data Clave reveló cómo se organizaron los tendenciosos procesos de licitación en la Administración Federal de Ingresos Públicos durante la gestión de Mauricio Macri. Cinco meses después, las irregularidades parecen continuar y desde el sector le atribuyen esa situación a algunos "heridos" de la era anterior que aún trabajan en el organismo. 

Entre 2016 y 2019 hubo apenas cuatros empresas que fueron elegidas para los servicios de mantenimiento eléctrico e instalación y reparación de aires acondicionados de todos los edificios de AFIP. Se trata de las firmas Climacentral SA, Orbinge SRL, Caccem SRL y Factory Service SA, entre las que repartieron las tareas en más de 20 edificios públicos por casi $112 millones

La denuncia trajo revuelo interno y promesas de revisión sobre las contrataciones. Se convocaron nuevamente las licitaciones públicas y las firmas mencionadas volvieron a participar, aunque los elevados precios que ofrecían las dejaron sin posibilidades de acceder a los contratos. Climacentral SA y Caccem SRL propusieron costos por el servicio que llegaron a doblar y en algunos casos triplicar los de las empresas con las que competían. 

Para uno de los grupos de edificios solicitados, Climacentral ofreció un valor cercano a los $10 millones mientras que Caccem incluso la superó por un millón. Lo insólito es que la empresa ganadora consiguió el contrato había ofertado sólo $3 millones por el mismo trabajo. En otros casos, las propuestas de las firmas "con privilegios" incluían sobreprecios de entre el 15% y el 55%. Aunque existían diferencias económicas similares durante el macrismo, estas empresas se quedaban con las tareas de todas maneras tal como se venía denunciando.

Sin embargo, el ordenamiento en las licitaciones está lejos de ser completo. Aunque son nuevas empresas las que ahora, con precios más cercanos a la realidad, se imponen en las compulsas, desde el área administrativa de la entidad plantean argumentos inéditos para entorpecer los convenios. ¿Obstáculos para que las licitaciones terminen en manos de las empresas de siempre?

Un ejemplo es la licitación que se realizó el 12 de agosto y tenía un plazo de 30 días para concretarse, todavía no avanzó. Así el proceso podría tener que repetirse o peor, podría adjudicarse a las mismas empresas beneficiadas de manera polémica durante años. En AFIP, algunas fuentes apuntan a funcionarios del macrismo que que aún siguen en el organismo e intentan continuar con viejas costumbres que no parecen fáciles de erradicar.