El suceso ocurrió a las 17:20 horas, mientras daba su discurso el diputado del bloque de Todos, Carlos Heller. Exactos sesenta minutos después, el presidente de la Cámara baja, Sergio Massa, se refería al hecho y anunciaba que el diputado Juan Ameri sería suspendido y una comisión decidiría si se lo desplaza o no del cuerpo. 

Pero más tarde el panorama fue cambiando. La presión para que el legislador toquetón renunciara se hizo cada vez más fuerte. Faltaban pocos minutos para la medianoche. Ameri intentaba explicar a la diputada Cristina Álvarez Rodríguez que todo había sido un malentendido desgraciado y que estaba arrepentido, cuando sonó el celular. Eran Massa y Máximo Kirchner. La legisladora puso al aparato en manos libres. "Renunciá hermano, o te echamos esta noche mismo", dijeron ambos.

Massa y Máximo fueron los que presionaron para que el legislador salteño asumiera la responsabilidad del escándalo que desató ayer por la tarde y oficializara la dimisión, que posteriormente fue aceptada por la Cámara Baja, por 224 votos afirmativos, 1 negativo y 3 abstenciones.

“Ante el hecho de público conocimiento me dirijo a usted para pedir disculpas por mi conducta durante la sesión especial remota del día 24 de septiembre del corriente. No fue de ningún modo mi intención faltar el respeto a esta Honorable Cámara, a mis pares diputados y diputadas, ni al pueblo salteño que me eligió”, expresó Ameri en la carta de renuncia que presentó al titular del cuerpo legislativo.

“Consciente de la responsabilidad que mi cargo representa, pongo a disposición mi renuncia como diputado nacional y seguiré trabajando por mi querida provincia de Salta y para que Argentina se ponga de pie”, concluyó Juan Ameri. Minutos más tarde, dejaría de formar parte del cuerpo legislativo.