La primera semana de operaciones con el Dólar Soja II, y una paridad de $ 230, alentó a las exportadoras a liquidar operaciones por US$ 955,8 millones, según cálculos privados sobre datos oficiales.  Sin embargo, menos de la mitad de ese monto, unos US$ 456,8 millones, quedaron en las arcas del Banco Central. 

En medio de este panorama, el analista financiero, Christian Buteler destacó que el precio que paga el Banco Central para comprar dólares termina siendo muy superior a los $ 230 comprometidos en el Programa de Incentivo a las Exportaciones. 

Por ejemplo, en lo operado durante la jornada de hoy, la entidad compró US$ 273 millones a $230, lo que equivale a $ 62.790 millones, pero vendió US$ 160 millones la $168,09, por los que obtuvo $ 26.894 millones. De esta manera “se quedó con US$ 113 millones pagando $35.896 millones por los que terminó convalidando $ 317,66 por cada dólar que sumó a las reservas”.

Desde la consultora Analytica apuntaron a que el nuevo “Dólar Soja” no resultaría tan efectivo como su edición de septiembre porque “no hay demasiados stocks por liquidar”. 

Si este tipo de cambio diferencial “estuviese dirigido a otros cultivos, como el maíz y el trigo (muy castigado por la sequía), el panorama podría ser algo distinto” a la hora de hacerse de reservas.

Sin embargo, “el trigo es el producto menos exportable. Mientras el complejo sojero promedió U$S 16.700 millones anuales de exportaciones entre 2018 y 2021 y el maíz por U$S 6.400 millones, en el trigo las ventas promedio fueron de sólo U$S 2.900 millones”.