Pasadas las 22 horas del jueves circuló finalmente el despacho de comisión con los cambios al texto original. La demora no se trata de algo excepcional. Suele suceder en el trámite legislativo un tiempo entre que se aprueba el despacho y se publica el original, que en tiempos de pandemia y debate virtual puede llevar aún más horas.

Entre lo más cuestionado, se incluyó un artículo que instruye a los jueces a comunicar ante el Consejo de la Magistratura "cualquier intento de influencia en sus decisiones por parte de poderes políticos, económicos o mediáticos, miembros del Poder Judicial, Ejecutivo o Legislativo, amistades o grupos de presión de cualquier índole". Esto despertó críticas en la oposición y también en los medios, que podría complicar -aún más- el trámite legislativo.

Los principales cambios que figuran en el dictamen, son los que ya había confirmado Data Clave:

Los sorteos de adjudicación de las causas serán grabados a través de medios técnicos bajo apercibimiento de nulidad.

La no unificación del fuero Civil y Comercial Federal  con el Contencioso y administrativo Federal con asiento  en la Ciudad de Buenos Aires

Se creará un tribunal de resolución de conflictos de competencia con plazos establecidos y procedimientos ágiles para resolver estas cuestiones preliminares.

Uno de los artículos que incluye esta reforma instruye a los jueces, en el curso de una causa, a "comunicar en forma inmediata ante el Consejo de la Magistratura de la Nación cualquier intento de influencia en sus decisiones por parte de poderes políticos, económicos o mediáticos, miembros del Poder Judicial, Ejecutivo o Legislativo, amistades o grupos de presión de cualquier índole, y solicitar las medidas necesarias para su resguardo".

El dictamen de reforma judicial incluye que los jueces deben comunicar presiones mediáticas

El texto original incluía denunciar las presiones por todos estos actores mencionados menos el "mediático". Esa inclusión la propuso el senado Oscar Parrilli, que generó fuertes críticas en los medios.

El debate podría arribar al recinto del Senado la próxima semana. Al contar con mayoría, será un trámite para el frente de Todos la aprobación. La negociación está en el recinto de la Cámara Baja y uno de los sectores aliados clave, Consenso Federal (referenciado en Roberto Lavagna), ya anticipó su rechazo. Desde este espacio le dijeron a Data Clave que “en el oficialismo se apuraron con el trámite y nos apuraron a que anticipemos nuestra posición, por eso decidimos rechazarla”. 

Para bloquear el intento oficialista de aprobar con celeridad este proyecto, en Juntos por el Cambio buscan congelar la actividad legislativa. Y una forma podría ser bloquear la continuidad del sistema virtual para sesionar. Con el fin de evitar esto, en el Gobierno enviaron a Diputados un proyecto que introduce cambios en el Fondo de Garantía de Sustentabilidad y mejora los plazos e intereses de las deudas que las provincias tienen con la Anses. Así, el oficialismo mantendrá activa la cámara y podría, en caso de tener los votos, debatir la reforma judicial.